La información geográfica tiene cada vez más valor. Estos días hemos sido testigos de espinosas polémicas al descubrirse que buena parte de los móviles inteligentes del mercado trazan la ubicación de sus propietarios, pero otra gran empresa que trabaja con la información cartográfica se ha visto también en el disparadero. Así, la holandesa TomTom (principal fabricante de sistemas de navegación GPS), se ha visto obligada a pedir disculpas al descubrirse que habían vendido la información recolectada por sus navegadores a los cuerpos policiales de aquel país.
La sistemática era la siguiente: los sistemas de navegación de la casa que contaran con algún servicio premium (como información del tráfico en tiempo real), enviaban la información relativa a la posición en la que se encontraba el usuario, y lo que es más importante, a la velocidad a la que circulaba el vehículo. Estos datos -TomTom garantiza que eran totalmente anónimos- eran después explotados por la policía holandesa para optimizar la situación de sus radares: los ubicaban en aquellos puntos en los que los vehículos circulaban más deprisa. Sus gestores han pedido disculpas y han asegurado que no volverá a suceder en el futuro.
[Fuente Engadget]
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